29/4/08

El resplandor


Si hablamos del hombre y la mujer, dicen que una linea muy delgada separa una amistad de algo más, y que la amistad dura hasta que uno de los dos hace clic.

Hace un par de años me dijiste: "Che, nena, yo no quiero arruinar la amistad pero algunas cosas..." y yo no te quise escuchar, no te dejé terminar la frase y te dije: "No seas boludo, dejate de joder, yo no quiero dejar de ser tu amiga... y tengo novio".
Vos ya sabías esto y me diste la razón, y atribuimos eso a que vos habías cortado con tu novia y te sentías solo. Estuvimos de acuerdo en eso y decidimos seguir con nuestra amistad.
Te esforzaste por mí, y te jugaste por mí, y te la bancaste por mí, y lo olvidaste por mí.
Porque yo te quería mucho (corrección: te quiero mucho) y no quería que nos alejáramos. Ya me había alejado de alguien en mi adolescencia por ese motivo pero era alguien que no me iba ni me venía, así que no me importó. Con vos era distinto.

Olvidamos el episodio y seguimos con nuestra amistad como si nada, como si esa charla (que duró segundos) no hubiese existido.
Hasta me dejaste dormir con vos cuando eso era todo lo que yo quería. Solo eso. Solo dormir. No dormir sola. Cuando estaba triste o cuando estábamos de vacaciones con amigos y por ahí caían amigos de sorpresa (la casa de mis abuelos siempre fue un "albergue para amigos y amigas en desgracia o cortos de dinero en vacaciones que no tenían donde quedarse" y estoy orgullosa de eso) y había que compartir cama. Nunca tuvimos problemas con eso. Y yo pensaba: "Puede dormir conmigo, ya se olvido de todo, que bueno".
Nunca nada, solo un comentario tuyo una noche después de unos cuantos tragos, cuando me dijiste: "algún día vas a hacer clic" así de la nada. Y yo no te di bola.
Creo que a veces hasta fui cruel con vos en ese sentido. Pero porque no quería que terminara nuestra amistad. Y vos lo supiste aceptar y seguir cerca mío como yo quería, como amigos.
Te pusiste de novio, yo corté. Me puse de novia, vos cortaste.
Idas y venidas y nosotros siempre igual. Eso me encantaba. Nuestra amistad era y es intocable.

Este fin de semana jugaste en Obras. Eran partidos importantes, eliminatorias para el mundial, la primera vez que se jugaba acá, bla, bla, bla.

Obviamente no iba a faltar. Además porque me habías amenazado con que si no iba ahí sí que se iba a terminar nuestra amistad jaja.
Nunca antes te había visto jugar en vivo y en directo delante mío (bueno sí, te vi, pero no de la forma en que te vi este finde. Te vi jugando con nuestros amigos y amigas en partidos mixtos en la playa, en vacaciones y hasta jugamos para el mismo equipo y vos me elegías porque decías que como yo jugaba hockey, era la única que entendía que no hacía falta que saliéramos todos corriendo en manada detrás de la pelota. Algo muy común en partidos donde juegan mujeres que no saben las reglas, y esto te ponía loco y yo me reía).

Te había visto en la tele, en otros países, a cientos de kilómetros y a veces a miles, y me alegré con vos y sufrí con vos. No suelo ponerme mal con partidos, porque entiendo que son juegos, pero esa vez que se armó lío y hubo golpes y todo y hasta entró la policía del país anfitrión una no podía no ponerse mal. Un amigo y sus compañeros, de los cuales conozco a la mayoría, agarrándose a piñas a miles de kilómetros con los del otro equipo. Pero bueno, cosas que pueden suceder en los deportes donde hay contacto físico.

Esta vez te tuve ahí a pocos metros.
Como dije, te conozco hace años, así que te vi con tu look casual, te vi en traje de baño y te vi de elegante sport. Con esas cosas te veías bien, pero... qué hermoso estabas con la celeste y blanca!
A veces la gente puede ser tan ciega, o tener las cosas adelante y no quererlas ver. Y otras veces algo brilla tanto que por más que una cierre los ojos no puede escapar a esa luz y esta le traspasa los párpado.

¡Boludo, tenías razón!

Pero vamos a atribuirselo a que mi novio está lejos y a que no me gusta estar sola.
Vamos a atribuirselo a la distancia y al resplandor que emite lo nuevo.
Vamos a atribuirselo a cuanto me gusta este deporte.
Vamos a atribuirselo al cariño que te tengo y a los años de amistad.
Y sobre todo vamos a seguir como hasta ahora. Porque me voy a olvidar de esto igual que vos.

¡Qué suerte que tengo blog y puedo hacer algo con esta carta en vez de tirarla a la basura que es el lugar
donde va a ir nuestra amistad si te llegas a enterar!

Nota: Para vos que estas mirando detenidamente la foto tratando de descubrir quien es... la foto no habla, no te va a decir quien es, y este chico no te va a saludar. ¡Qué chusma que es la gente! ¡Por Christian Dior!
Chiiiiiiiiva, caleeeeeeeeeenchu.
¿Dónde está Wally? (No, no se llama Walter... desde cuándo doy nombres? ¡No me conoces nada, che!)

Que boluda estoy hoy... sepan disculpar.

27/4/08

Last chance


Bueno, finalmente hablé con mi abuela (la bloody snake, bah, ex bloody snake hasta que me demuestre lo contrario y vuelva a llamarla así).
Antes había hablado con mi mamá y le dije que cuando viera a mi abuela le iba a decir algunas cosas que me molestaban de ella y le iba a decir que me diga lo que le molestaba de mí, para ver si nos podíamos poner de acuerdo en algunas cosas y tratar de no llevarnos tan mal.

En realidad las cosas que me molestan de ella se las digo siempre, solo que sin la mínima delicadeza, y ella opta por hacerse la víctima y por supuesto a ese papel no se lo cree ni ella, porque todos en la familia sabemos que de víctima no tiene nada. En todo caso, será víctima de sus propias palabras, de sus actos y de sus pensamientos. Nadie atenta contra ella más que ella misma.

Mi mamá me dijo que le parecía bárbaro y que no esperaba menos de mí.
Igual le dije que no se ilusionara mucho, porque a mí la paciencia con ella ya se me terminó hace rato. Solo que se ve que revolviendo la alacena encontré una lata perdida por el fondo que tenía 250 grs más. Pero es la última y no se fabrica más :P

Y sobre todo le dije que más que nada lo hacía por ella, no por mi abuela, y por el resto de la familia ya que como ahora vive acá en Bs. As. nos vemos más seguido y la relación que tenemos por más pobre que sea se iba a tornar extremadamente insoportable.

Así que ayer a la tarde cuando vino mi abuela como todos los sábados, hablé con ella.
Obviamente le sorprendió que yo quisiera hablar con ella.
Sentí que no entendía mucho la situación, o mejor dicho, no entendía por qué yo quería hablar con ella. Y... no es para menos jajaja.

No la noté muy tranquila al principio aunque haya aceptado hablar conmigo.
Y durante un rato bastante largo tenía la sensación de que ella pensaba que yo estaba drogada o que me hacía la tranquila para en algún momento sacar un arma y darle 5 tiros en la frente.

Hasta hubo lugar para algún que otro chiste. Perdí la cuenta de los años que llevaba sin hacerle algún chiste.
Lo que le hacía eran bromas que me causaban gracia solo a mí. Pero cuando era chica. Como la vez que le puse un huevo crudo adentro de una bota o las tantas veces que le pegaba chicles en las sillas y bromas por el estilo.
Pero esta vez fue distinto. En el momento en que le pregunté si quería un capuchino y después de pensarlo 3 o 4 segundos me dijo que sí pero no muy convencida. Le dije que no pensaba envenenarla en mi propia casa, porque eso era un lío tremendo. Mucho papelerío de la policía, un juez en casa... mucho lío, y yo odio los trámites.
Le causó gracia. Aunque creo que su risa fue de compromiso.

Hasta que al rato comprendió todo. Hablamos re bien, y no le dije ningún sarcasmo ni me le reí en la cara, y eso ya es decir mucho. Y ella no se hizo la víctima en ningún momento, lo cual también es decir bastante.

Entre las cosas que me dijo fue que debido a mi carácter (a esta altura ya sabrán que no soy una persona fácil) ella no se animaba a acercarse mucho, pero que entendía el porque de mi rechazo hacia ella y me dijo que reconocía que ella no había sido la clase de abuela que a todo nieto o nieta le hubiese gustado tener y que se arrepentía de no habernos aprovechado cuando éramos más chicos. Tambien dijo que se daba cuenta que ahora era un poco tarde y que no podía volver el tiempo atrás pero que iba a tratar de arreglar las cosas que había hecho mal en el pasado.

Lo que más me sorprendió es que se echara toda la culpa ella. O sea, yo pensaba que algo de culpa me iba a recriminar, pero no. Porque esto viene desde hace muchísimo tiempo, desde que yo era muy chica, y convengamos que yo no soy precisamente una santa pero tampoco soy de esas personas que se la agarran con alguien porque sí. Si yo me enojo y me la agarro con alguien es por una buena razón. Y ella lo sabe.
Así que al final me pidió disculpas por las veces que me hizo sentir mal de chica y yo le pedí disculpas por las veces que se me fue la mano en las discusiones llenándola de insultos y golpes bajos.

Me dio un beso en la frente como hacía mi otra abuela y un abrazo.
Aunque no con el mismo efecto. Porque yo cuando mi abuela paterna me daba besos en la frente y me abrazaba sentía como que venía un ángel y me envolvía en sus alas. Parece una pelotudez pero yo cuando era chiquita sentía eso. Mi abuela era mi ángel de la guarda y lo sigue siendo. Y como si fuera poco se llamaba, se llama, Angeles.
Esta vez sentí un cubito de hielo en la frente, pero tengo en cuenta el gesto. Tal vez algún día sea distinto. No creo que llegue a ser como mi otra abuela pero al menos espero sentir que sus muestras de afecto no son de compromiso.
Y me agradeció que yo le haya ido a hablar porque de otra manera ella nunca lo hubiese hecho por miedo a que yo la sacara volando.

Bueno, esto pasó como a las 4 de la tarde.
después yo me fui con mi amigo Cris y volví a la noche antes de la cena.

Cuando llegué me dijo mi mamá que mi abuela le había pedido a uno de mis hermanos que la llevara a Unicenter porque quería comprar unas cosas y cuando llegó me regaló una bufanda (yo adoro las bufandas, y a eso lo sabe hasta mi abuela) y unas medias de lana de esas que tiene antideslizante que se usan tipo pantuflas. Porque yo adoro andar descalza por la casa.

Bueno, fue todo mejor de lo que pensé. Obviamente los regalitos son lo que menos me interesa pero los tomo como un buen gesto.

Tengo una última lata y la abrí... te voy a convidar el contenido pero no lo desperdicies, porque ya no hay más... además tené cuidado porque el borde es filoso y te podes cortar y no va a ser culpa mía porque estas avisada.

24/4/08

Onírico



Iba manejando mi Citroen C4 color negro con stickers de los Backyardigans pegados por todos, lados con mi ahijada como copiloto.
Ella lucía igual que ahora pero hablaba como una nena mucho más grande (de unos 8 o 9 años).
Ibamos camino a Unicenter mientras cantábamos una canción de Barney que se llama "Comer fruta". Esa que dice "Crecen en las ramas de los árboles. Crecen sin cesar. Si observas bien podrás mirar toda la comida que los árboles nos dan".

Estacionamos y bajamos corriendo para ir a los juegos para chicos.
Después de divertirnos un rato largo decidimos ir a comer a Arabian's King. El lugar era igual al verdadero. La única diferencia era que lo atendían unas chicas vestidas como Shakira y unos chicos vestidos como Aladin.

Cuando estábamos comiendo se acercaron a nosotras dos hombres grandotes vestidos de traje negro y con lentes oscuros, similares a los agentes de Matrix. Los acompañaba una mujer de pelo largo y rubio. Cuando la miré me di cuenta de que era Cris Morena.
Sin pedirnos permiso se sentó en nuestra mesa y los dos hombres de negro se pararon detrás de ella y miraban nerviosos para todos lados.
Cris me miró y me dijo: "Soy Cris Morena y estoy buscando a alguien que se parezca a esta persona -puso una foto sobre la mesa- para interpretar un papel muy importante en la próxima película de Harry Potter que se está filmando en Londres".
Miré la foto y había una chica igual a mi vestida de bruja. Hermoso atuendo.

Le pregunté cuanto me iban a pagar y me dijo que 10 millones de libras esterlinas. Así como si nada.
Yo le dije que me encantaría interpretar el papel pero que ese día no podía viajar porque a la noche festejaba el cumpleaños de mi mamá (lo primero es la familia ja!).
Cris me dijo: "Ok, viajas mañana, pero te vamos a tener que descontar 5 libras".
Le dije que no había problema (con 9.999.995 libras me arreglo jeje).
Me preguntó si quería que mi ahijada actuara también y le dije que no porque no sabía hablar inglés.
Se despidió dándome un sobre con mi pasaje y diciéndome que a las 13 hs del día siguiente salía mi avión.
¡Que reunión con mi representante ni ocho cuartos! Ya habíamos arreglado todo en minutos.

Se ve que viajé y filmé porque la siguiente imagen que vi en mis sueños fue a mí misma sentada en un sillón con Axel Kutchevasky en frente mío haciéndome preguntas acerca de la película y de mi participación en ella.
No se por qué, pero a pesar de ser ambos argentinos igual hablábamos en ingles.

En otra imagen aparecí entrando al living de Susana Gimenez con la música de Harry Potter de fondo y vestida de bruja. Susana se acercó a saludarme y la seguían como 15 perros iguales a Jazmín.

A la salida del canal me esperaba mi club de fans y la policía había tenido que cortar la calle de tanta gente que había (que grosa! jaja).
Mientras firmaba autógrafos y me sacaba fotos, se me acercó el marido de Adriana Aguirre para manguearme entradas para la première de la película (una rata el tipo jaja). Le dije que no tenía y me manqueó una varita mágica. No se la di.

En la última imagen estoy saliendo de la facultad con mis compañeros (con mi varita mágica en el bolsillo del jean jaja). Se ve que a pesar de todo había decidido seguir estudiando.
Miré hacia la calle y vi que Lucho Aviles la cruzaba corriendo con un micrófono en la mano. Lo seguía Chiche Gelblung y Laura Ubfal era camarógrafa.

Por suerte me desperté porque de los tres solo me banco a Chiche y hasta ahí nomás.

23/4/08

De todo un poco III


1) Anoche ganó el club de mis amores. "I'm so fucking happy I could cry" dice un tema de Green Day. Bueno, no, no tengo ganas de llorar pero estoy muy pero muy muy muy super mega archi contenta!





2) No fui a la cancha porque dejé ir a mi cuñada en mi lugar con mi amada ahijada. Tenía que ser así.
Así que 2 minutos después de finalizado el encuentro deportivo, me llamó mi novio, que es gallina, para saludarme con su típico "¿¿Estás contenta, maldita bostera??".
Lo amo! Como ya dije, él no tiene la dicha de ser de Boca, pero comparte mis cábalas aunque esté a miles de kilómetros de distancia y a pesar de ser hincha de nuestros archi rivales.
¡Eso es amor!


3) Tengo un vecino gallina que ya da asco de tan fanático. Porque que sea fanático, bue... hay muchos así, no digo que esté bien pero es comprensible. Te gusta mucho un equipo, bla, bla, bla.
La cosa es que éste además de ser fanático es anti boca a más no poder y de los más repugnantes. Ya pasó la línea de lo patético. Un tipo grande que casi pisa los 50 años y discute y se pelea con adolescentes por un partido de fútbol. Brinda espectáculos lamentables por doquier.
Se compra camisetas de los equipos que juegan finales de libertadores e intercontinentales contra boca. Eso no sería nada, pero el tipo tiene 6 hijos y se vive quejando de que no le alcanza la plata para nada. O sea, no te alcanza la plata pero te gastas $300 en la camiseta de un club de afuera del que no sos hincha. Ahí ven lo chiquito y liso que tiene el cerebro.
Además sale a la calle con esas camisetas y carga a todo el mundo. Que cargues a tus amigos de onda o a gente que te carga vaya y pase, pero el tipo carga a cualquiera. Una vez la cargó a mi mamá que no le tiene ni una décima de confianza y además no se lo banca. Mi mamá le dijo que era ridículo y patético. Ya ven a quien salí jajaja.
Obviamente grita y festeja los goles que le hacen a boca. Cuando Boca perdió la última intercontinental hizo un brindis en la vereda de su casa con otras gallinas.
Pasó un vecino en moto de esos que nunca pero nunca se pelean ni discuten con nadie y el tipo lo salpicó con champagne. El pibe se bajó de la moto decidido a romperle la cara. Si no fuera por otro vecino, la gallina ya tendría el pico roto. Además se puso detrás de su hermano para que el chico no le pegue. Sin palabras. Se defecó. Se le deben haber llenado las botas.
Como si fuera poco se compra cohetes para tirar cuando le hacen goles a boca o para festejar cuando river sale campeón. Bueno, es obvio que esos cohetes ya no sirven... :P
Ayer cuando llegó mi hermano a mi casa, el susodicho estaba en la vereda y le dijo "Ya tengo los cohetes preparados". Es menester decir que mi hermano nunca lo carga, pero ayer le dijo "Si son los de la libertadores pasada que tenías para festejar si ganaba river deben estar húmedos".
Afortunadamente anoche no tuve que escucharlo. Solo cuando empezó el partido que gritó "¡Vamos Maracaibo!" y cuando terminó el partido gritó un "¡La p... madre!".
Yo obviamente yo estaba eufórica!!! Al él nunca le respondo porque no quiero tener problemas con los vecinos. Solo le respondí una vez en la Libertadores pasada que me dijo "¿Para que vas a la cancha si hoy van a perder?" el día ese de la neblina cuando Boca ganó. Yo lo corté con un seco "¿Quién te dio confianza para cargarme? ¡Viejo ridículo!". Yo nunca cargo a nadie. Que no me joda.
Ayer a la mañana cuando salí y me vio me dijo "¿Está difícil hoy para los bosteros, eh??" y me hice la que no lo escuché para evitar problemas.
Como estaba eufórica y tenía bronca acumulada y como dice Moria "Todo lo que entra tiene que salir" y porque lo que te guardas te envenena tenía que festejar de alguna manera. Así que salí corriendo y cantando por la casa (tipo Macaulay Culkin cuando se quedó solo en su casa y festejaba por eso) mientras escuchaba a otros vecinos que también son de boca festejar. Busqué uno de esos canutitos que tiran luces de colores que tenía mi hermano guardados, lo encendí y me fui a la terraza. En la terraza de al lado estaban mis vecinos de boca gritando y saltando con una bandera. Me puse a tirar lucecitas de colores y se pusieron todos a gritar. En la vereda había otros vecinos y vecinas que cantaban y uno de ellos le tocaba el timbre a la gallina al ritmo de las canciones y por supuesto no salió.
No se me ocurrió mejor idea que apuntar las luces hacia su casa y los chicos se pusieron a cantar "¡Es para vos! ¡Es para vos! ¡Gallina .... la .... que te parió!".
Yo no suelo hacer esas cosas pero anoche ameritaba.
Estaba sola en casa mirando el partido con mi perro porque mi familia estaba en la cancha. Algo tenía que hacer. No podía con tanta euforia.
Hoy vi al ridículo rojo de bronca, con cara de traste y no le dirigió la palabra a nadie. Salí a la mañana para ir a la facu y no me saludó jajaja.
Lo que más contenta me pone es que se tuvo que guardar los fuegos artificiales ya saben donde.
Yo los usé, pero a él le debe estar doliendo el trasero de tanta pólvora. Yo en su lugar no me acercaría al fuego porque va a salir volando como el cura brasilero :P


4) Vi el partido en la cocina, en mí silla, en mí lugar, donde veo los partidos de boca cuando juega de visitante.
Hacía muchísimo que no iba a ver a boca de local y al estar en casa sola en lugar de estar en mi butaca en la platea sentí algo muy raro. No me gustó. No estar en el lugar donde estás acostumbrada a estar se siente muy raro. Salvando las distancias debe ser algo "parecido" a lo que debe sentir un jugador acostumbrado a ser titular cuando tiene que mirar el partido de afuera por una lesión o algo que le impida jugar.
Al menos yo sentía algo parecido a lo de anoche cuando jugaba al hockey y por alguna razón tenía que estar en el banco en vez de estar jugando.
Mirando el partido desde casa cuando debería estar en la cancha una siente que "no puede hacer nada". Obvio que estando en la butaca tampoco pero una al menos puede cantar y alentar y junto con los demás los jugadores escuchan eso y por algo dicen que la hinchada de boca es como un jugador más. Por algo le dicen "La 12". Pero en casa los jugadores no me escuchan y una siente impotencia jajaja. Ni siquiera tenía a quien abrazar. Así que abracé a mi perro que no entendía nada y el gato se asustó por mis gritos y salió corriendo.
No falto más a la cancha al menos en esta copa.
Lo que tenía que cumplirse ya se cumplió y otro partido así yo no aguanto.

22/4/08

¡¡¡ VAMOS !!!


¡¡¡ DALE BOOOOOOOOOOO !!!
¡¡¡ DALE BOOOOOOOOOOO !!!
¡¡¡ DALE BOCA, DALE BOOOOOOOOOO !!!
¡¡¡ DALE BOOOOOOOOOOO !!!
¡¡¡ DALE BOOOOOOOOOOO !!!
¡¡¡ DALE BOCA, DALE BOOOOOOOOOO !!!

¡¡¡¡¡ VAMOS BOCA !!!!!

20/4/08

El grito


Muy feo despertarse a las 3 de la mañana porque una escuchó un grito desgarrador en el dormitorio y darse cuenta de que la única que esta allí es una misma.
O sea, peor sería encontrar algo como por ejemplo un fantasma o una persona desconocida, o la nena de
"La llamada" obvio, pero la sensación esa de despertarse creyendo que hay alguien más y encontrar la habitación vacía es como mínimo fea. Esos segundos antes de encender el velador para ver de donde viene el grito son de lo más escalofriantes.
Más si una está sola en la casa.

Seguramente es obra de
l pseudo fantasma que habita en casa del cual no tenía noticias desde hacía varios meses.

NOTA: El grito no fue mio y definitivamente no estaba soñando. No se si será por el sobresalto o qué, pero recuerdo lo que estaba soñando hasta el momento de despertarme y no tenía nada que ver con eso.

16/4/08

Tregua


Según el diccionario: Suspensión de hostilidades entre beligerantes, por tiempo determinado.

Ayer mi media naranja se fue de viaje por trabajo. Pasadas las 10 a.m. despegó rumbo a New York.
Mi gran amigo Cris y yo lo llevamos a my lovely man hasta Ezeiza y lo despedimos.

Como ayer no trabajé porque había adelantado las cosas para tener el día libre, luego del bye bye my dar, fui con Cris a su departamento y me quedé a pasar el día. Cris llegó de viaje hace poco y era una linda oportunidad para ponernos al día con el bla bla bla.

Cris es un big big friend of mine. Cris es gay y lo grita a los 4 vientos y se banca lo que venga. Admiro su valentía. Yo lo llamo "loca", y es una de las personas mas queribles y adorables que conocí en mi vida.

Ibamos en su auto de Ezeiza a Palermo (donde él vive) y...

Cris: Che, tetona... ¿Qué me vas a cocinar hoy? No te creas que el corte de pelo te va a salir gratis.

Olvidé mencionar que Cris es peluquero y estuvo haciendo cursos para actualizarse en París. Muy chic él, y después de un año de estar en Francia volvió a su Buenos Aires querido.
Volviendo al relato...

Gioconda: Te voy a hacer un lomo al champignon que te vas a chupar los dedos de los pies, trolito.
C: Jajaja! más respeto pendeja de mierda. Ahora llamame coiffeur, que estudié en Francia.
G: Que coiffeur ni ocho cuartos, hace 4 años viajabas en La Costera (él es de La Plata) y ahora te haces llamar coiffeur. ¡Anda, colorado patas sucias!
C: Jajaja, que hija de puta!

Nuestros diálogos son así, nos puteamos porque nos queremos.

Pasamos por un supermercado y compramos materia prima. Llegamos y me puse a cocinar en su enorme, hermosa e impecable cocina, porque el susodicho no sabe ni hacer un té.
Me empieza a joder con que tiene hambre. Parece un nene de 6 años. Le digo que ni mi novio me jode tanto con los horarios.
Mientras cocino, se sienta en la mesada y charlamos de la vida mientras me ceba mates.
Me cuenta su experiencia en Francia, que París es hermoso, que aprendió mucho, que los franceses en la calle andan con cara de orto y si les preguntas algo y no te entienden bien no te dan ni bola pero que la gente con la que le tocó trabajar era muy copada, que conoció a un yankee llamado James que fue a hacer los mismos cursos que él, que tuvieron noches apasionadas, que extrañaba mucho Buenos Aires, etc.

Le resumo el año que estuvimos sin vernos, le cuento que D me hace muy feliz, me dice que se me nota por la cara de pelotuda enamorada, se caga de risa y me dice que fuera de joda me nota muy bien y que se alegra por mí y que D le cayó bárbaro, le cuento de la facu, de mi familia y del curso de chef.
Me dice que él tiene ganas de ponerse de novio y que tiene ganas de hablar con el chico con el que salía y con el cual decidieron darse libertad para que Cris viajara a Francia sin preocupaciones. Me confiesa que hace más de un mes que nada de nada. Le digo que se le nota en la cara de malco. Se caga de la risa y me tira con una naranja. Me dice que soy una guacha pero que me quiere igual y que nadie lo putea tanto como yo. Le digo lo mismo.

Comemos. Le gusta mi comida.
Después me tiñe el pelo y me lo corta. Tengo nuevo look y me encanta. Se nota que sabe mucho. Le doy las gracias y me hace prometer que no voy a dejar que nadie más me corte el pelo y menos los taraditos de Giordano. No se los banca jajaja.

Después ponemos el dvd de Celine Dion y su show en Las Vegas. Amamos a Celine.
Cantamos los temas de recital mientras nos clavamos unos Häagen-Dazs que había comprado para la ocasión. Celine se merece eso y mucho más y nosotros ni les cuento. Ja!

Llama mi mamá a mi cel y me pregunta por Cris. Ella lo adora. Me pide que le pase con él y hablan un rato. Cris le promete ir a visitarla el fin de semana.

Cuando corta me dice: "Hija de puta, no me contaste que había venido la vieja conchuda".
Le digo que se me pasó. Ya sabemos de quien hablamos. La vieja conchuda es mi abuela.
La bloody snake le cayó como el ojete el primer día que la vio. Cris había ido a mi casa con toda la buena onda y cuando lo vio, mi abuela le dijo: "En mis épocas los hombrecitos no se teñían el pelo ni se hacían los claritos", a lo que Cris, ni lento ni perezoso respondió: "Es que yo no soy hombrecito, yo soy putito". Idolo!

Desde esa vez, cada vez que lo veía se alejaba de él y no lo saludaba, como si Cris tuviese lepra o algo por el estilo.
¿Ven que es conchuda en serio?

Le cuento a Cris todo con lujo de detalles: que la echaron de donde vivía antes, que se la pasa molestando, etc, etc, etc.
Me dice que me entiende y que estoy en todo mi derecho de hacer y decir lo que quiera, pero que con todo lo que pasa la que más sufre es mi mamá. Le digo que ya lo se.

Me cuenta que la abuela de él, que no le dirigía la palabra desde que le había blanqueado que era gay había muerto hacía 4 meses, y agrega que le hubiese encantado tener una abuela buena onda de esas que apoyan a sus nietos. Y me dice que 2 semanas antes de morir, su abuela lo había llamado por teléfono para pedirle perdón por no haber sido una buena abuela y que aunque no se lo decía hacía mucho tiempo, ella lo quería un montón.
Me dice que le hubiese encantado al menos darle un beso de despedida pero que no había podido. Y me dice que si él estuviese en mi lugar tal vez le daría otra oportunidad a la snake. Que lo piense. Que si no es por ella, al menos que lo haga por mi mamá.
Que quien sabe... que ahora que la voy a ver más seguido porque se va a quedar a vivir en Bs. As. por ahí podemos recuperar algo del tiempo perdido en peleas.

Este guacho me puede.
Le digo que lo voy a pesar y estoy en eso.

No voy a ir así de una a decirle "¡Abuelita, como te quiero!" porque sería muy falso de mi parte, pero cuando la vea voy a hablar con ella y a tratar de hacerle entender eso: que le queda poco hilo en el carretel y que en vez de desperdiciarlo siendo una basura podría aprovecharlo en cosas buenas antes de encontrarse con la punta del hilo.

Una oportunidad más...
Voy a poner todo de mí aunque sea por mi mamá. Pero es la última.

A ver que pasa...

13/4/08

Give it to me!


Medio día en la escuela de cocina. Aproximadamente 30 alumnos trabajando en grupos de 4 o 5.

Es muy lindo el ambiente en el que trabajamos. Hace pocas semanas que empezamos el curso y a pesar de que hay diferencias de edades bastante amplias nos llevamos todos muy bien.

En realidad creo que nos llevamos bien por eso también, ya que la mayoría de la gente anda entre los 25 y los 30 años, y hay un par de 19 o 20, y un "nene" que no es un nene pero le decimos así de cariño que tiene 15 años y dos señores que andan por los 50.
Como si fuera poco, está el grupito de los "hermanos latinoamericanos", como les llama uno de los señores de 50 años de cariño. Son chicos y chicas que vienen de Perú, Colombia, Brasil, Puerto Rico y Chile. Muy buena onda todos.

Lo mejor de todo es que trabajamos en un ambiente donde la gente es amable, si hay algo que sobra es camaradería y todo el mundo ayuda y es ayudado. Tal como se debe trabajar en una cocina. Y toda la gente lo tuvo claro desde el momento en que pisó la escuela.

Como ya dije, trabajamos en grupos. Si bien cada grupo tiene un líder. No para que diga "soy el líder, síganme como ovejas", sino porque en todo grupo tiene que haber alguien que organice para que no se vaya todo al diablo, nadie se cree más que nadie (porque no lo es) y nos vamos distribuyendo las tareas.

Hoy nos tocó hacer preparaciones con huevos. Huevo pasado por agua, huevo frito, huevo duro, tortillas de distintos tipos, omelettes, revueltos... en fin, comimos como bestias porque probamos todo lo que hicimos y nos llevamos cosas a casa.
Sí, hoy hicimos huevo... (lo digo yo así les ahorro el tener que hacer el chiste fácil).

Bueno, como dije, la mayoría de la gente tiene buen humor y hace chiste. Algunos no hacen chistes porque son más serios pero tienen buena onda y no se molestan.

En un momento el profesor dijo: "Bueno, ya hicieron todos sus preparaciones individuales. Ahora vamos a hacer de cuenta que estamos en un restaurante y que nos pidieron 20 omelettes. Así que júntense en grupos de 10 y hagan 20 omelettes. Tienen 10 minutos."

Ustedes estarán pensando: ¡Qué pavada! 10 personas... 2 omelettes cada uno. No es tan difícil.

Sí, claro... pero el "pequeño" detalle es que a los 10 minutos tenían que estar los 20 omelettes hechos, calientes, emplatados y decorados.
Y no un omelette como los que hacemos en casa donde agarramos una sartén, batimos 3 huevos, los tiramos ahí y que el supremo nos ayude. Y si sale bien o mal no importa porque total lo vamos a comer nosotros.

¡No seño! Estos llevaban, los 3 huevos, que no se baten sino que se hacen de otra manera, porque no tienen que tener burbujas (el batido provoca esto), con el aceite a cierta temperatura, y se les agrega jamón y queso, se les hace 2 dobleces y ahí sí, al plato y a decorar. Y todo eso se hace en 5 minutos aproximadamente.
Y no se ustedes, pero mis compañeros y yo tenemos solo 2 manos cada uno, con una mano tenemos la sartén y con la otra echamos las cosas adentro y sostenemos la espàtula. Entonces hacer uno con cada mano es imposible.

Pero no se preocupen, no es algo imposible. Hay un secreto, y es, como dije antes, distribuirse las tareas. Hicimos eso y entonces tuvimos a 5 personas controlando 4 sartenes cada uno (controlar es cocinarlos acomodándolos con una espátula y haciéndole los dobleces cuidando que no se quemen ni se rompan, solo eso), 3 poniendo los ingredientes y 2 emplatando.
Todo eso rápido. Que si esta bien hecho es una maravilla.

En teoría es muy fácil. Ahora vamos a la práctica.

Si alguien nunca vio una cocina industrial, les cuento que las que tenemos nosotros tienen 6 hornallas, de las cuales cada uno de los alumnos encargados de las sartenes usaba 4. Hay varias cocinas así que teníamos espacio.

Mientras un grupo de 10 hacia el trabajo los demás miraba, y después los hacia el otro grupo de 10 y los demás los mirábamos a ellos.

Pasó el 1er grupo. Bastante bien, algunos omelettes se les quemaron un poco pero llegaron bien de tiempo y trabajaron bien en equipo.
Después vino el nuestro.

Nos distribuimos y empezamos a trabajar. A mi me toco ser una de las chicas que hacían la preparación para volcar en las sartenes. Y una de las chicas de mi grupo de 5 que se había juntado con el otro que es de esas re chispitas, de las que se viven riendo y hace un escándalo por cualquier cosa (escándalo de los divertidos, no escándalos de mala onda) le tocò se una de las personas encargadas de las sartenes. A esta chica la llamaremos S.

Cuando ya estaban los huevos listos, la gente que estaba encargada del emplatado debía ir con una placa (algo parecido a una asadera) por detrás de la persona que estaba con la sartén y acercársela para que esta pusiese el omelette. Se preguntaran: ¿Por qué por detrás?
Porque si uno se acerca por adelante, corre el riesgo de que la persona que cocina al dar vuelta la sartén sobre laplaca, le salpique aceite caliente en la cara. Con un omelette no pasa nada porque casi no tiene aceite, pero con otras preparaciones sí. Y como eso se usa para todo, hay que acostumbrarse a trabajar así.

Bueno, ya habíamos puesto los ingredientes y estábamos esperando a que las chicas les avisaran a los de emplatado que les acercaran las placas para pasarlos ahí y que después esos chicos los pasaran a un plato y los decoraran.

S terminó de hacer sus omelettes y le dijo a un chico de emplatado: "M, dame la placa". M, que se había olvidado que debía acercársela por detrás hizo todo lo contrario y se puso del otro lado de la cocina entregándole la placa frente a ella. Cosa que no se debe hacer porque además para poner algo ahí, la persona que cocina si o si tiene que pasar la placa por arriba de las otras sartenes y eso no se hace porque puede haber algún residuo en la parte de abajo (no olvidemos que las placas van en el horno y a veces se queman) y caer en la preparación, y de pasar eso, el omelette no sirve más y se debe tirar.
Bueno, eso en un mundo perfecto. Que se haga o no así en los restaurantes es otra historia, pero nosotros debemos aprender a hacerlo bien.

Como M se había equivocado de lugar, se apareció en frente de S y esta desesperada le grito: "¡No, M! ¡Es por el otro lado! ¡Dámela por atrás!".
Claro, dirigirse al otro lado implicaba dar vuelta al rededor de una mesa que mide 5 metros. Y cuando se esta trabajando con aceite a 220 grados, esos pocos segundos pueden hacer que algo se queme. Así que S estaba desesperada porque empezaba a salir humo de sus omelettes y se estaban empezando a quemar. Entonces seguía gritando: "¡Dale M! ¡Dámela por atrás! ¡Dámela por atrás! ¡Rápido! ¡Dámela! ¡Dámela!"

Esto gritando frente a 30 y pico de personas que empezaron, empezamos, mejor dicho, a reírnos a carcajadas. M, colorado como un tomate y S sin darse cuenta por qué se reían y gritando a más no poder.

Hasta que el profesor, ya riéndose también, le dijo: "Bueno S, no te desesperes, ya te la va a dar. Pero tenes que ser más sutil cuando pedís esas cosas. Cualquiera va a decir que estas desesperada".

Fin del relato. ¿Qué paso con los omelettes? Se quemaron un poco, pero... ¿A quién le importa? Si habíamos presenciado tremendo gag digno de una película cómica.

El pobre M, muy tímido él no sabía donde meterse. Y S, al darse cuenta de por qué nos reíamos casi se hace pis de la risa. Y empezó: "¡Jajaja! ¡Me meo! ¡Me meo!" y salió corriendo de la cocina.

11/4/08

PROHIBIDO PASAR (largo como puteada de tartamudo pero se lee rápido)


Gracias a la "visita" de la bloody old woman (mi abuela, obvio) la paciencia de muchas personas, se ve puesta a prueba. Entre ellos, las personas de mi círculo familiar y otras como tíos, tías, primos y primas, novios de dichas personas, parejas, sex toys, vecinos, encargados de edificios y todo ser (incluidos los animales) que se acerque a la vieja.

Porque la vieja que se hacía la mosquita muerta, la víctima, la incomprendida, la "el mundo contra mí", la pobrecita, se ha cansado de ese papel y decidió ser "ella misma".
Nos hubiese encantado que siguiera fingiendo que es simpática y buena persona, porque al menos jodía pero no tanto. Pero no, parece que se cansó y desde hace algunos días de la pasa molestando a todo el mundo.
Estamos en confianza así que hablemos en criollo: Nos rompe soberanamente las pelotas a todos, incluso a las personas que por cosas de la naturaleza carecemos de dichas gónadas.

Como este odioso, detestable, despreciable, abominable, aborrecible, antipático y repelente ser anda de casa en casa porque no tiene nada que hacer, y hasta que se alquile algo (que hasta el próximo mes parece que esto va a ser imposible) nuestra paciencia llega a su límite y muchas veces la sobrepasa.

Hoy, nuestra familia tuvo el desagrado de contar con su presencia.
La señora que trajo al mundo a mi mamá, llegó a casa temprano. Claro, si se levanta a las 5 de la mañana (sí! a las 5!). Y como no le importan los demás (a esta altura ya se deben haber dado cuenta) a las 6:00 ya estaba tocando el timbre de casa.

A ver... en casa todos trabajamos pero nuestro lugar de trabajo queda justo al lado de casa y abrimos a las 8. Así que a esa hora no estamos despiertos ni de casualidad. O si lo estamos es porque nos levantamos para ir al baño. ¿Para qué nos vamos a levantar a las 6:00 si podemos levantarnos 7:30, bañarnos, desayunar y llegar al trabajo fresquitos y de buen humor?

Obviamente hoy no sucedió eso. Ya que la vieja, a las 6:00 ya estaba con su dedo gordo, arrugado y chueco pegado al timbre y no se despegó de ahí pasados 10 segundos como para asegurarse de que todos nos hubiésemos enterado de su llegada. ¡Vieja turra, es obvio que lo hace a prepósito!
Obviamente la que se levantó a abrirle fue mi mamá.

Cuando una persona sabe que al bajar las escaleras que van de su habitación al comedor se va a encontrar con uno de los seres más repulsivos que la naturaleza ha creado no se levanta de buen humor. Sobre todo si sabe que ese ser va a tratar de hacerle la vida imposible, porque a esta altura ya sabemos que eso está en su naturaleza. La vieja de mierda lo disfruta, es obvio.

Así que cuando salí de bañarme, me miré al espejo y me dije: "Ok, la bloody old snake está debajo y se va a quedar varias horas. Lo que a ella le gusta es sentirse con poder, hacer sentir mal a la gente y sentirse impune porque es vieja y porque es la madre de mi madre. Una vieja de mierda, sí, pero la mamá de mi mamá a quien adoro y no me gusta hacer sentir mal y la única razón por la cual me contuve de romperle la cara varias veces (sí, así como suena). Entonces, como no quiero que se arme la podrida, voy a ignorarla o a servirme de mi sarcasmo tanto como me sea posible para que mi mamá no se sienta mal y además porque eso me divierte mucho. Y así mato a dos pájaros de un tiro. La vieja se queda con la sangre en el ojo porque lo que a ella le gusta es ver enojada a la gente y yo me divierto porque se que por dentro se está muriendo de bronca".

Bueno, me dije algo así.
Así, que al terminar de arreglarme, bajé la escalera con una tremenda sonrisa que la vieja no esperaba ver, porque la mayoría de las veces que la veo le pongo cara de asco o de "no te rompo la cara porque no quiero problemas" (y ganas me sobran, pero ya contaré el porque en otro post, y les adelanto que son razones muy fuertes, no es por simple capricho o de exagerada que soy).

Saludé a todos, a mi mamá y a mi papá con beso y abrazo como siempre (soy re cargosa con mis viejos desde chica y no pienso cambiar), a mi hermano más chico que recién había llegado también y a mi otro hermano. A mi abuela solo le regalé un "hola" y una palmada en la espalda, como quien pasa por al lado tuyo y te mata un mosquito. Automáticamente fui y salude a mi perro con beso en la frente y abrazo y el usual "hola perito!" (sí, "perito" y no perrito. Le digo así de cariño).
Esto le causó mucha gracia a mi papá que sabe el amor que siento por mi perro y ninguna a mi abuela, porque sabe muy bien que prefiero a mi perro y que como le dije una vez, en caso de hundimiento de barco y si hubiese un solo lugar en un bote al tener que elegir entre mi perro y ella ya saben quien ocuparía ese lugar.
Eso se lo dije cuando tenía unos 11 o 12 años. El lugar sigue reservado para mi cuadrúpedo amigo por supuesto.
El desayuno transcurrió sin altercados, charlamos mientras miramos un canal de noticias, como siempre, y yo hacía de cuenta que la vieja no estaba ahí. Incluso le pasé una tostada con dulce de leche a mi hermano delante de su cara.

Terminamos de desayunar, nos levantamos y salimos por la puerta que da a nuestro lugar de trabajo. Esa puerta separa dos mundos totalmente diferentes. El de mi casa que es un lugar muy tranquilo y el del trabajo donde hay máquinas ruidosas (es una imprenta), computadoras encendidas, gente de acá para allá yendo y viniendo, a veces corriendo y sobre todo gente concentrada en su trabajo.
En casa hay dos entradas, una que da a la oficina donde estamos mi papá, uno de mis hermanos y yo, y otra que da a los talleres donde están mi otro hermano y los empleados. La puerta de la oficina es de libre acceso a quienes entren por casa. La otra no. Por ahí solo entramos nosotros o gente autorizada por nosotros, porque están las máquinas y puede tornarse peligroso para quienes no conozcan el lugar.

Es más, en esa puerta hay un cartel que dice "PROHIBIDA LA ENTRADA A PERSONAS NO AUTORIZADAS". Es el mismo cartel que está puesto en la otra entrada, la que ve una persona que ingresa por la entrada principal, o sea, la que da a la calle.
El lugar no es taaaan peligroso, pero está puesto por precaución, porque es obvio que alguien que pase y no conozca las máquinas no va a ir a meter la mano o a tocar algo, pero si hay algo que sobra en este mundo es gente boluda o curiosa y nunca se sabe lo que puede pasar.

Otra de las razones por las cuales pusimos el cartel es para que no entre gente molesta. Como la persona de la cual vengo hablando.
Es un cartel muy simple que entiende cualquier persona que sepa leer y tenga 2 dedos de frente. Bueno, parece que esta señora hubiese leído "PASA IGUAL, TOTAL LOS QUE ESTAN DEL OTRO LADO ESTAN AL PEDO Y LES VA A ENCANTAR TENERTE A VOS EN MEDIO DEL TALLER ROMPIENDO LAS PELOTAS".

Si hay algo que no soportamos es que nos vengan a molestar cuando estamos trabajando y estamos apurados. Si estoy trabajando relajada no me molesta que venga nadie. Varias veces trabajamos tomando mates y si viene algún conocido lo invitamos a la oficina y no hay problema. Ahora, si estoy apurada suelo ignorar a la gente, pero antes les aviso que disculpen que no les de mucha bola pero estoy apurada. O sea que aunque esté trabajando bajo presión el trato es bueno con todo el mundo. Salvo con la víbora, quien nunca es bienvenida.

Así, que a los 15 minutos de estar trabajando, la vieja se apareció por el taller.
La recibió mi hermano que la quiere tanto como yo y le dijo: "¿Abuela (él todavía la llama abuela), no sabes leer? No podes pasar por acá y menos con esa pollera. Mira si te la enganchas con algo. Pasa por el otro lado."

Mi hermanito menor que es como yo pero, alto, sin tetas, con barba de pocos días, pajarito en lugar de cotorrita y voz gruesa; la versión masculina claro está, y por lo tanto siente un respeto por esta mujer que yo, por ser del mismo sexo y por saber que no es tan frágil como le quiere hacer entender a los demás, no le tengo.
Pero la trata bien por eso, y porque es la madre de nuestra madre. Digamos que si mi abuela fuese hombre ya le hubiese roto la cara hace bastante.
Así que le dijo eso, y viniendo de él, eso es algo así como que le haya dicho: "Abuelita, tené cuidado. ¿Por qué no pasas por la otra puerta que es menos peligroso? No quiero que te lastimes con algo".

El taller se comunica con la oficina también por una ventana y como estaba abierta pude escuchar todo con lujo de detalles.
Ni lerda ni perezosa la vieja dio media vuelta y mudita se dirigió a la otra puerta.
Claro, por la otra entrada estaba yo, y fue la 1er persona a la que vio al pasar.
Sin decirle nada, giré la silla y me quede mirándola fijo con cara de "¿En qué te puedo ayudar?", pero con la expresión que ponen los trabajadores de la Municipalidad de San Martín que no tienen ganas de hacer nada y te miran como si fueses a interrumpir su arduo trabajo que en realidad la mayoría de las veces consiste en tomar mate y comer galletitas.

Antes de que sigan leyendo debo advertirles que a continuación se encontrarán con "lenguaje adulto". Sepan que no siempre soy así, pero los diálogos con mi abuela son la muestra de lo que soy cuando ya no tengo paciencia (cosa que pasa muy pocas veces, salvo con ella que me hartó hace mucho).

Como la vieja no decía nada y se había puesto a recorrer la oficina con la vista como si fuese la primera vez que se encontraba ahí y ante la cara de mi hermano que ya estaba sonriendo porque sabía que yo algo le iba a decir, hablé de nuevo:

Gioconda: (con tono bien seco) ¿Necesitas algo?
Bloody snake: No, no, solo vine a mirar (con tono de "¡Yo no hice nada!")
Hermano de Gioconda: (hablándome a mí de trabajo como si no hubiese nadie más con nosotros) Fijate que Fulanito está conectado y me dijo que te va a mandar las modificaciones que quiere para el logo nuevo.
Gioconda: Ok!
B S: (dirigiéndose a mi hermano) ¿Estás trabajando?
H de G: Sí, abuela... (tono de "¿No ves?")
B S: (esta vez dirigiéndose a mí) ¿¿¿Y vos???
G: No, yo me estoy rascando el felpudo. (Me criè entre hombres y a pesar de ser muy femenina puedo ser mucho mas guaranga cuando quiero, tomen esto como un chiste de salon).

Se escuchò la carcajada de mi otro hermano que había entrado a la oficina haciéndose el que buscaba algo pero lo conozco y se que entró para ver que le decíamos a la vieja, ya que la había mandado para sacársela de encima.

Seguimos con nuestras tareas como si nada. Mi papá se había ido a ver a unos clientes y mi mamá estaba en casa, o sea fuera del ámbito de la oficina.
Si hay un lugar donde una se siente impune de todo lo que pueda hacer o decir es ese lugar cuando las puertas están cerradas, ya que, del lado del taller no se escucha nada por el ruido de las máquinas y en la casa tampoco porque hay un pasillo en el medio. Así que si la cosa se ponía pesada yo podía decir lo que se me diera la gana sin que se sintiera mal mi mamá.

La vieja como pancho por su casa cruzó la oficina y se dirigió al taller. Para ese entonces las máquinas ya estaban en funcionamiento y había bastante ruido. Yo la seguí con unos papeles en la mano haciéndome la que necesitaba algo de ahí, con el único objeto de pescarla in fraganti para sacarla zumbando de ahí. Era lo único que quería. Que se mandara alguna para echarla con razón y que no volviera más a molestar.

Siempre la oficina fue mi lugar de escape cuando no quería estar en casa si había visitas insoportables. En realidad son dos los lugares: la oficina y mi habitación. Pero una queda mejor si se hace la que trabaja cuando no puede poner de excusa el estudio. Y no iba a permitir que nadie invadiera mi lugar, mucho menos la bloody snake.

Se ve que hoy los astros estaban a mi favor y todos los planetas alineados perfectamente.
Lo único que yo quería era que la vieja me diera una buena razón por más pequeña que fuese para expulsarla de mi territorio y que no volviese más.
Y se lo hice saber...

B S: ¿Me estás vigilando?
G: Ni más ni menos...
B S: Si tantas ganas tenés de que me vaya echame.
G: Dame una razón y tus deseos serán ordenes.

Muy de película, sí. Es que me encantan estos diálogos. Con esta vieja de mierda me siento Beatrix Kido en Kill Bill intercambiando dardos con Vernita Green antes de matarla clavándole un cuchillo en medio del pecho.

Mi hermano más chico, pasó entre nosotras para volver al taller y murmuró: "Che, Gioco, deberíamos poner un cartel que diga ALTA TENSION acá, no? jeje". Un amor mi hermanito.
Si alguna vez buscan a alguien que calme las cosas no tienen que llamarlo a èl. El no sirve para eso.

Como dije, los astros estuvieron de mi lado y tuve la oportunidad que yo tanto ansiaba.
La víbora quiso pasar entre dos máquinas de curiosa que es, porque nunca la dejamos entrar ahí. Como no es ninguna boluda, cuando está mi papá ni se acerca al taller, pero en se momento él no estaba, así que haciéndose la rebelde como si fuese una pendeja hincha pelotas que solo quiere molestar para ver que pasa o llamar la atención, pero más patética aún porque es vieja, quiso pasar entre dos máquinas que sirven para abrochar y se enganchó la pollera.
No pasó nada porque la máquina en la cual se enganchó estaba apagada y de haber estado encendida a lo sumo la hubiese dejado en bolas, pero no más que eso.

La que sí estaba encendida era la otra.
Igualmente, no desperdicié la oportunidad y le grité: "¿Sos sorda o boluda? ¿No te dijimos que no podías entrar al taller con esa pollera? ¿Vos queres que la máquina te rompa una pierna?".
En el taller todos sabemos que "la rompe huesos" es otra máquina, que sin exagerar te los puede romper como si fuesen de madera balsa. Ese tipo de máquinas, a lo largo de la historia de la imprenta se ha cobrado varias falanges, metacarpos, trapecios, e incluso huesos de ante brazos. O sea que este tipo de máquina impresora (una de verdad, no de las que todos tenemos en casa) no es moco de pavo.

Mis gritos hicieron venir a mis dos hermanos. Cuando preguntaron que había pasado les dije que la vieja se había enganchado con una de las abrochadoras y que de haber sido otra máquina seguramente le hubiese pasado algo más grave.
Mi hermano del medio le dijo: "¿Vos sos loca?" Sabes bien que no podes entrar acá. ¿Cómo hay que decírtelo para que entiendas?".
Mi otro hermano se limitó a decir: "No, si parece que es sorda. Yo le dije antes que no entrara al taller y no me dio bola".
La vieja quiso defenderse, diciendo: "Bueno, no paso nada".
El hecho de que quisiera minimizar las cosas me dio bronca y le dije: "Si a alguien le pasa algo acá adentro el problema es nuestro y por más vieja y pelotuda que seas si te pasa algo a vos, también. ¡Andá a la casa y dejate de romper las pelotas!"

Se hizo la enojada, o se enojó, no se ni me interesa, pero dio media vuelta y se fue por donde había venido.

Mi hermano del medio repetía: "¡Qué vieja boluda!" una y otra vez.
Y yo, con calma, porque la verdad es que nunca la había perdido, solo que aproveché la volada para echar a la vieja, le dije: "Ok, no more snakes!"
Se dio cuenta y le causó gracia.

Obviamente cuando vino mi papá le contamos lo que había pasado y a la hora del almuerzo se lo contamos a mi mamá también, quien como si la vieja fuese una niña de 5 años la retó de lo lindo y le dijo que no entrara al taller nunca más.
Cosa que prometió y cosa que va a tener que cumplir.

6/4/08

De todo un poco II

* No me gusta que cada vez que voy a visitar a mi novio a su trabajo, el chico que trabaja con él me ponga la mano en el cuello cada vez que me saluda.
¿¿Por qué hace eso?? ¡Es incómodo!

Se lo dije a mi novio y se caga de risa. Ok, acepto que haya gente que me ponga la mano en un hombro cuando me saluda y me da un beso o que me agarre un brazo, pero... ¿¿el cuello??? ¿Con qué necesidad? Encima yo odio que me toquen el cuello porque tengo cosquillas. La única persona que tiene permiso es mi novio así que odio que su amigo haga eso. Le dije a mi novio que le diga y me dijo: "¿Cómo se lo digo?"
¡Qué se yo, si supiera ya se lo hubiese dicho! Shit!



* Una compañera de la facultad que tenía en primer año se había cambiado de turno. La semana pasada me fui a anotar y me la encontré de casualidad. Me dijo que va a volver al mismo turno de antes y se anotó en las mismas materias que mis amigas y yo. Es simpática, buena onda, etc. Ahora... tiene un aliento de los mil demonios y cada vez que nos habla se nos acerca a la cara como si no pudiese hablar si no nos tuviese a 10 cm de distancia. Encima cuando nos alejamos se nos vuelve a acercar como si tuviese su cara agarrada a la nuestra con un hilo.
¿Vamos a tener que luchar con eso todo cuatrimestre?


* Se me pegó la canción "Hay amores". Esa que canta Shakira. La canto todo el santo día, incluso en el colectivo. La mina no me cae ni bien ni mal pero el tema me gusta. Ayer cuando volvía de mi curso de chef se me sentó al lado un tipo muy feo. En la radio estaba sonando y me puse a cantarla en voz baja. Yo venía con un ratatouille y me puse a comer del tupper mientras tarareaba (estaba rico y era una picardía dejarlo enfriar). El tipo me mira y me dice: "No te da vergüenza comer del tupper?", le digo: "No. Lo cociné yo y tengo ganas de comerlo. Lo vergonzoso sería si lo hubiese robado". Y el tipo me dice: "Yo la verdad que no podría comer así tan libremente en un colectivo. A mi me da vergüenza hasta comer un alfajor". A lo que retruqué: "Sin embargo sale a calle con esa cara. Yo eso sí que no podría hacerlo".
Sí, ya se que estuve mal, pero el tipo tenía una mala manera de decir las cosas y a mí el hambre me pone de mal humor.


* Detesto que gente que me conoce hace 2 minutos me hable como si me hubiese investigado al mejor estilo Medina de Los Simuladores. Hoy al medio día fuimos a almorzar a la casa del amigo de mi papá (la pareja de Rita Turdero, del post del mismo nombre).
Estaba la hermana del gato viejo y cuando llego la voy a saludar y me dice: "Ah, vos sos Gioconda! Hija de Guillermo, estudiante de psicología y hace poco empezaste la carrera de chef. Jugabas al hockey en el mismo club que la hija de Carlos y fuiste a Inglaterra con ella, no?".
¡¡A la mierda!! ¡La yegua le hablo de mí!
No pude más que responder: "No hace falta que me presente, entonces. Que lindo que me tengan tan en cuenta".
Es que la vieja detesta a todo ser que se lleve bien con la hija de su pareja. Vaya una a saber las cosas que le habrá dicho de mí. Bueno, parece que algunos de mis comentarios la tocaron. De lo contrario no se preocuparía tanto por alguien como yo.

3/4/08

De todo un poco I

1- PELUDO DE REGALO:
El martes cayó de visitas mi abuela... say no more.
Bueno, sí, digamos más y hagamos catarsis.
Todos saben que mi relación con la bloody old woman nunca fue buena, así que no pretenderán que hable bien.
Resulta que como conté en otros posts, ella vive en Salta en la casa de uno de sus hijos (uno de mis tíos, hermano de mi mother, etc.).
Corrección!!! Vivía en Salta hasta el martes!
Me contó my dear mother que se peleó mal con su nuera, pero muy mal, y se ve que la rajaron. Bueno, ella dice que ella dijo: "Me voy a Buenos Aires!", pero para mi que la rajaron.
No sería nada raro, su nuera se la tenía jurada y con mucha razón. La vieja es insoportable y se mete en todo. Demasiada paciencia le tuvo. Yo le hubiese dado tremenda patada donde no le da el sol hace mucho.
Entonces, ahora el "paquete" anda por Buenos Aires, viendo donde se queda. Haciéndose la víctima con quienes le pregunten sobre el tema.
Como es de imaginar tiene varias puertas cerradas que le costará mucho abrir. Y algunas de imposible apertura, como la de mi casa, a no ser que sea de visita y por pocas horas.
Lo más gracioso es que desde que llegó amenaza con la siguiente frase: "Miren, yo no quiero molestar. Así que si no puedo quedarme con ninguno de mis hijos me voy a alquilar algo y listo".
Todo eso con cara de perrito abandonado en pleno invierno con tormenta y hambre que mira hacia adentro de una casa donde una familia comparte manjares frente al fuego de una cálida chimenea.
Obvio que no enternece a nadie. Todos la conocemos bien.
Ampliaremos.


2- MALA, MALA, MALA ERES:
OK, cuando era más chica tenía una pizca de maldad. Que me llevaba a hacer cosas como soplarle cosas mal a compañeros insoportables que tenían que dar lección en inglés y se sentaban cerca mío para que los ayudara. La vieja de inglés siempre tomaba oral desde el banco, entonces yo tenía la oportunidad de dictarle frases incoherentes y no la desaprovechaba, para risa de mis otros compañeros y con la excusa de "vos en las pruebas nunca te sacas 10. Si le decís todo perfecto la vieja se va a dar cuenta de que te estoy soplando, mejor te dicto algo mal y así disimulas". Y de paso yo me divertía.
O le soplaba cosas ridículas a una compañera muy hueca, como la vez que en una lección sobre países de América, le preguntaron cual era la industria más grande de Bolivia y yo le dije que eran sus numerosos astilleros.
Reconozco que otras veces hacía uso de mi maldad sin causa aparente también. Quién no?
Ahora, que la bloody old woman me diga que soy diabólica porque no la quise acompañar a rezar el rosario a la plaza que está cerca de casa, donde se juntan las demás viejas todos los miércoles a la tarde es demasiado.
Igual me causó bastante gracia. Cuídense, que pueden estar en presencia del nuevo eje del mal.



3-LLORANDO POR UN SUEÑO:
Ayer fui al entrenamiento del club de mis amores. Por eso no acompañé a mi abuela a la plaza. Bueno, sí, es verdad. A quién quiero engañar?? No la acompañé porque no me la banco. Pero a ella le dije eso delante de otras tías y quedé re bien. Ja!
Para los que nunca fueron, los entrenamientos son así:
Llegas a la cancha, vas a "La Bombonerita" que es una cancha más chica donde entrenan y entras mostrando el carnet de socio.
Siempre está lleno de gente, obvio, pero solo entran los socios y si quieren pueden hacer entrar a otro que no lo sea.
Entonces cuando llegas, están todos amontonados en la puerta, y cuando ven que sacas el carnet, empiezan a decirte cosas como "puedo entrar con vos?", "vengo de Mendoza", "vengo de Ushuaia", "vengo de Mongopicholandia y me hice 3.500 kilómetros a pie y 400 en el lomo de un tapir", etc.
A veces hacemos pasar a alguien, pero no siempre, porque el socio tiene que hacerse responsable de quien entra con él y la verdad que no es joda porque si alguien se manda una macana el socio tiene que pagar si rompe algo o si se manda una bien grande le pueden bloquear el carnet y a llorar a la gruta.
Ayer solo teníamos lugar para 2 invitados nada más porque ya llevábamos nosotros a gente que no es socia.
Siempre pienso que es increíble lo que hace la gente por ver a sus ídolos.
Cuando una persona llega con su carnet y 50 personas le piden entrar con ella, se siente raro.
Porque empiezan a rogar, implorar, a ofrecer cosas (una vez un tipo de Mar de Plata le ofreció 2 cajas de alfajores Havanna que tenía preparados en una bolsita para sobornar al tipo de seguridad y no lo había logrado jaja), y lo más gracioso, hay fanáticas que hasta lloran por ver a Rodrigo Palacio o a Martín Palermo, o al jugador que más les gusta. Rodrigo encabeza el top ten jaja.
Tanto que ayer cuando llegamos, vienen dos chicas llorando y nos empiezan a decir: "Dejanos entrar, please! Queremos ver a Rodrigo! Venimos de re lejos! Buaaaaaa!! Buaaaaa!!" A los gritos, histéricas mal!
Yo tenía a mi sobrinita en brazos y una de las chicas me tironeaba de un brazo, otra la agarraba de los hombros a mi mama y le rogaba "Por favor señora! Estoy aesperando desde las 7 de la mañana (eran las 11:00)", entre lágrimas, mocos y baba y mi sobrinita se asustó y se puso a llorar ella también a los gritos. Un re quilombo! jajajaja.
Para que dejen de gritar como locas, mi papá les dijo: "Bueno, dejen de gritar! Son ustedes dos solas?" Ante la respuesta afirmativa, las hizo pasar.
Pudieron ver el entrenamiento y después conseguir algunas firmas. Y para alegría de ellas la de Rodrigo Palacio. Cuando nos retiramos nos agradecieron unas 800 veces. Antes ya nos habían agradecido unas 600.
Lo que hace el fanatismo! Pero esta bueno poder "cumplirle el sueño" a alguien. Una se siente Julian Weich jajajaja.

1/4/08

Rita Turdero



¿Recuerdan a la pareja del amigo de mi papá de éste post?

Para quienes no tengan tiempo o ganas de releerlo, les cuento que es una señora que hace unos años era una simple empleada doméstica y después su vida dio un vuelco y ahora es la pareja de un señor con mucha plata y un corazón bien grande que le banca todo.
Eso no sería nada del otro mundo. Lo malo es que esta persona parece haber olvidado su pasado, parece que ahora se le puso en la cabeza que ella tiene solo un poquito menos de clase que la reina de Inglaterra, y trata como basura a "sus" empleadas domésticas, les dice de todo, las mira con asco, habla mal de ellas delante de los demás.
En fin, una grasa total. Porque esa parte sigue saliendo a la luz muy seguido, sobre todo a la hora de aparentar.

Reeeeeesulta, que el sàbado a la tarde pasaban ella, su pareja y la hija de su pareja (amiga mía) cerca de casa y al amigo de mi viejo se le ocurrió comprar unas facturas y venir. Cayeron de sorpresa como tantas otras veces. No nos molesta que gente que queremos caiga de sorpresa, sobre todo el amigo de mi papá que es casi un tío para mí y mis hermanos y a quien queremos mucho, y mi amiga ni hablar, es una gran amiga, compañera de viajes, etc, y aunque no nos veamos muy seguido hablamos siempre y la amistad sigue intacta.
Bueno, no podemos decir lo mismo de Gatùbela (como apodé en otros posts a la pareja del amigo de mi papá).

Llegaron, nos saludamos, etc, etc, etc.
Hasta ahì todo normal. Bueno, casi normal. Cuando Gatùbela hizo su entrada, no pude evitar mirar a mi mamà de reojo, quien con una sonrisita me devolvio la mirada.
Gatùbela lucia un atuendo muy particular.
A saber: Calzas blancas (sì, una señora que tiene la misma silueta que Carmen Barbieri con calzas blancas!), zapatillas y una musculosa animal print de leopardo, al mejor estilo Susana Gimenez pero con muchìsimo menos glamour, por supuesto.
Ah! Y como si fuera poco, todo eso acompañado de unas tremendas extensiones que debo reconocer que estaban muy bien hechas y lucian muy naturales. Iguales a las pelucas que usa Moria.
Olvidè mencionar que esta señora (por decirle de alguna manera) es fanàtica de Moria Casan.
Le copia el look, o mejor dicho, trata de copiàrselo y hasta quiere imitarla en actitudes y repite frases de ella.
Se le cuelga de las lolas, como tantas otras. Pero a esta no la conoce ni su perro.

Tratè de no reirme apenas la vi, pero no pude. Asì que tratè de disimular mi risa corriendo a abrazar al amigo de mi papà como lo hago desde chica y a saludarlo y despuès hice lo propio con mi amiga, quien al abrazarme me dijo: "Viste lo que se puso, no? Se quiere hacer la Moria Casan y es Rita Turdero!"
Saliò todo bastante natural ya que hacìa meses que no los veìa, asì que la excesiva alegrìa quedò bien desimulada :P

Entramos a casa, nos pusimos a charlar, preparamos cafè y mate y el amigo de mi papà dice: "Che, por què no llamamos a Carlos? (otro amigo de ellos) Estarà en la casa?". Mi papà le dijo "Supongo debe estar, llamalo".
Llamaron a Carlos y le dijeron que viniera a casa. Asì que 20 minutos màs tarde llegaban Carlos y su esposa a quien tambièn queremos mucho.
La esposa de Carlos es una loca linda, amiga de mi mamà y casi una tìa para mì, con quien nos reimos siempre de las estupideces que dice y hace Gatùbela.

Cuando llegò Beatriz (la esposa de Carlos) no pudo evitar decirle: "Estas re Casanesca! Que extenciones!".
A lo que Gatùbela respondiò: "Viste? Me salieron $1.300, y eso que me hizo descuento el peluquero, que es ìntimo amigo mìo".

Algo que ella hace siempre: decir el precio de lo que tiene, y de lo que tienen los demàs.
Ej: "Ay, tenes puesto el CH de Carolina Herrera que sale $250!", "Estas botas me salieron $400", "Esa es la remerita de wanama que sale $95", etc, etc, etc.
Tiene una fijaciòn con los precios de las cosas. Alla ella.

Charlando de todo un poco, a Beatriz no se le ocurre mejor idea que tirar una frase de Moria, para que Gatùbela se enganche y se ponga a hablar. Como no le cuesta nada y muerde el anzuelo simpre...

Entonces Gatùbela dijo: "Hablando de Moria! Vieron a Carmen? Mi vecina?" (una vieja ridìcula que va al mismo club que ella, tambièn perteneciente al Moria fans club).
"Si, la señora del pelo color Viviana Canosa", respondo.
"Si, ella" me dice. "Bueno, se separò del marido. La semana pasada lo echò de la casa. Me contò que ahora sale con un chico 15 años menor."

A ver, a ver, a ver!! Esa señora debe tener unos 60 años. Entonces alguien 15 años menor, anda por los 45... conclusiòn: no es ningun "chico".
Pero no importa, sigamos.

Beatriz pregunta: "Mirala vos a la vieja, tan tranquilita que parecìa"
"Sì, no sabes. Esta hecha una pendeja, ahora se viste re bien, tiene otro brillo, y claro... si tiene un sestoy!"


Ay, ay, ay!
Me reì, pero no la corregì. ¿Para que decirle que se dice "sex toy" si a los 5 minutos va a pronunciar mal de nuevo? Ademàs es màs divertido escucharla decir eso.
Le seguimos la corriente.
Mi amiga preguntò: "Pero la cosa va a en serio o es solo un touch and go?"
Y gatùbela rematò: "No creo que de para mucho, debe ser eso, un tuchangò!".

Rita Turdero, señoras y señores... màs ridìcula que a propòsito.

Te queres hacer la top y sos màs ordinaria que sushi de merluza, mi a mooooor!