Estoy en Córdoba, vine a visitar unos días a mi tía preferida (que es hermana de mi mamá) y después me la llevo a Bs. As. a pasar las fiestas con la familia.
Mi tía es viuda hace 3 años, pero la loca es un canto a la vida. La vi llorar una sola vez, el día del velatorio y después se puso las pilas como la mejor y siguió con su vida. Siempre adelante. Es una persona muy positiva y la adoro. De ella aprendí mucho. Hasta la muerte de mi tío, vivía en Bs. As. y luego se mudó porque siempre quiso vivir en las sierras, y la verdad que acá se la ve muy feliz.
Se levanta cantando, hace sus cosas, se va a trabajar (es odontóloga), va a natación, sale con las amigas... hace de todo. Parece una mina de 30 años jaja.
Tiene un hijo que vive en España hace 5 años y que le dijo que venía para Año Nuevo, pero se tomó vacaciones y va a venir a Argentina a pasar las dos fiestas, así que llega a Bs. As. el martes, pero ella no sabe nada. Flor de sorpresa!
Cuando llegué me recibió re bien como siempre. Me trata como a una hija y la verdad que la amo y me encanta pasar tiempo con ella.
Bueno, cuando la veo no puedo evitar acordarme de mi tío que era un canto a la vida como ella. Eran tal para cual y mi tía lo recuerda con mucha alegría. No llora, lo recuerda con una sonrisa y con algún chiste de los que él hacía o en determinados momentos dice: "Si estuviese tu tío acá diría tal cosa" y la mayoría de las veces son cosas graciosas. Hasta ella sigue haciendo chistes sobre mi tío y no se permite bajonearse.
Con ellos nos divertíamos mucho siempre, incluso en lugares donde teníamos que estar serios, por eso no me sorprendió y me causó mucha gracia algo que pasó el día de su velatorio y mi tía sostiene que es algo que él "mandó" a hacer para que nos riéramos un poco.
Les cuento lo que pasó:
Mi tío falleció un sábado a la mañana producto de un paro cardíaco, era el mes de agosto y hacía mucho frío. Había salido el viernes con mi tía y con amigos y mi tía lo encontró muerto el sábado a la mañana en su cama. Todos queremos creer que murió mientras dormía y que no sufrió. Mi tía dice que no soportó una noche de sexo desenfrenado jajajajaja.
Bueno, el sábado al medio día le entregaron el cuerpo a mi tía y empezó el velatorio al que asistió mucha gente. Mi tío era médico y había trabajado en varios lugares y había dado clases en la Universidad de Buenos Aires, en la de la Plata, en la del Salvador, y en la de Córdoba. Por lo tanto tenía muchos conocidos, y además muchos amigos y mucha gente que lo quería.
Así que al velatorio además de parientes que vivían en Argentina y en otros países fueron médicos, profesores y muchísimos alumnos.
Nunca vi tanta cantidad de alumnos, ni pensaba que iba a haber tantos, ya que mi tío era muy exigente cuando daba clases y no te aprobaba así nomas. Yo muchas veces le decía en joda: "Qué guacho que sos tío, como te gusta arruinarle las vacaciones a tus alumnos" y él me decía: "Yo prefiero que me digan que soy un guacho que arruina vacaciones y no que un alumno mío apruebe sin saber y le arruine la vida a un paciente, que estudien como estudié yo, mierda!". Yo se lo decía en joda porque me encantaba cuando se hacía el malo y puteaba, porque de malo no tenía nada.
Así que al velatorio fueron muchos alumnos que se ve que lo querían un montón porque muchos lloraban a moco tendido.
Mucho llanto, mucho moco y mucha baba, como decía mi tío jajaja.
Y a la tarde lo llevaron a un cementerio privado donde también está un hermano de él que yo no conocí porque vivía en España y falleció cuando yo era chica.
Cuando íbamos entrando al cementerio con el auto (yo iba con mi tía y mi primo) mi primo dice: "Qué triste venir a este lugar de mierda" y mi tía le dice: "Sí, pero peor es quedarse jajajaja". Eso era algo que siempre decía mi tío y nos empezamos a reír los tres. El chofer no entendía nada.
Bajamos, llegan los demás, nos vamos al lugar donde lo iban a enterrar y donde ya había un pozo hecho, llevan el cajón, viene un cura, dice un par de cosas, le tiramos flores, bajan el cajón, le ponen una alfombrita arriba (porque en los cementerios fashion no vienen los tipos con las palas y se ponen a trabajar ahí, al cajón lo entierran cuando nadie ve) y el cura dice: "Los invito al altar..." bla bla bla.
Había un pequeño altar a unos metros de la tumba donde el cura decía unas últimas palabras y daba una bendición a los familiares del difunto y que se yo.
Fueron todos menos mi primo, otro primo más, una tía y yo. Nosotros nos quedamos un rato más con mi primo poniendo flores.
Al lado de la tumba de mi tío, había otra tumba (como a 3 metros) que tenía una alfombrita. Se ve que habían dejado el cajón hacía poco tiempo. Después de estar un rato ahí, empezamos a caminar hasta el altar donde estaba el cura dando la bendición (para esto se usa la pequeña capilla que hay en el cementerio, pero en ese momento estaba ocupada por familiares de otra persona), y cuando llegamos, vemos a lo lejos a una prima que llegaba tarde.
Entra corriendo y llorando, nos saluda con la mano y agarra unas flores que traía y se pone a acomodarlas sobre la alfombrita que cubría el cajón. Pocos la vimos, porque la mayoría estaba prestándole atención al cura.
Yo miro a mi prima y le digo a Andrés (mi primo): "Mirá, ahí llegó Anita", y mi primo me dice: "Anita la despistadita... vamos que te vas a reía un rato". Le digo: "A dónde nos vamos a reír?" se ríe y me dice: "Vos vení". Nos ponemos a caminar hacia donde estaba Anita, le hace señas a mi otro primo y vamos los 3. Cuando vemos a Anita que lloraba, mi primo la abraza y le dice: "Che boluda, le pusiste las flores al vecino!!".
Anita no entendía nada y cuando lee la pequeña placa con el nombre del que estaba enterrado se da cuenta de que no era la tumba de mi tío.
Así que los cuatro empezamos a reírnos a carcajadas mal mientras los demás no entendían por qué. Viene otra tía y nos dice: "Ey, de que se ríen?? Estamos en un cementerio!" y cuando mi primo le cuenta lo que había hecho Anita se pone a reírse ella también y así se sumaron un par. Hasta que otro primo dice: "Che, cambiemos las flores de lugar. A este quién lo conoce?" y se pone a agarrar las flores y a llevarlas a la tumba de mi tío. La tumba de mi tío, como dije, estaba a unos metros así que había que caminar un par de pasos. Los demás nos negamos a ayudarlo porque estábamos tentados.
Mi primo iba y venía con las flores y vemos que se acercaba gente que no conocíamos. Supuestamente gente que conocía al otro difundo y le digo a mi primo: "Ezequiel, ya fue, deja las flores ahí y vámonos, queda re mal, parece que te estas afanando las flores para llevarlas a la otra tumba".
Los demás se van y yo me quedo con mi primo que tenía las flores en la mano y le digo: "Cagamos, te vio la vieja, disimulá, decile algo... que vergüenza".
Cuando llega la vieja, mi primo acomoda unas flores en la tumba del desconocido y le dice: "Lo siento, señora" (mi tío hubiese dicho: "No! Para qué? Mejor dejalo ahí acostado!")
. Y la señora le dice: "Gracias querido -le da un beso a él y otro a mí y nos agarra las manos- ustedes eran alumnos de tango en la academia de mi marido?" y el caradura de mi primo le dice: "Si... qué bien que bailaba su marido!... un orgullo haber sido sus alumnos" (gracias primo por meterme en el medio).
Eso dicho por mi primo que es de madera terciada y le pide permiso a los pies para caminar. La señora le dice: "Sí, lástima que por la diabetes le tuvieron que cortar una pierna y ya no pudo dar más clases...". "Pero siempre lo recordamos, era muy bueno cuando bailaba", la interrumpió mi primo poniéndole una mano en el hombro (se puede ser más cara dura?).
Yo no sabía donde meterme. Ahí estábamos los dos, agarrándole la mano a una viejita y hablando de un desconocido que era profesor de tango, le faltaba una pierna y del cual eramos supuestos alumnos orgullosos de su trabajo. Too much!!!
Yo rogaba que mi primo no siguiera hablando para no embarrarla más. Así que la corté ahí nomas y le dije: "Eze, me siento mal, me quiero ir a casa", no me sentía mal pero quería alejarme lo más rápido posible de la vieja. Mi primo me dice: "Si, mi amor ya nos vamos" (perdon????) y la mira a la vieja y le dice: "Es que está embarazada, este olor a flores le hace mal, mejor nos vamos así no se pone a vomitar delante suyo".
Un divino mi primo. Le encanta hacerme quedar mal.
Los demás ya se estaban yendo porque había terminado el show del cura. Así que la saludamos y le dijimos que nos íbamos.
La señora le dijo a mi primo que cuando quisiera podía pasar por su casa a saludarla, que muchos alumnos lo hacían y que se yo. Y me dice a mí: "No te pongas celosa, vos también estas invitada cuando venga tu novio... es tu novio, no? Me di cuenta porque no tienen anillos, así que no están casados". (Menos mal! Pensé que me iban a dejar afuera! Y no, no me casaría con alguien como mi primo ni aunque fuese el único hombre sobre la faz de la Tierra) A lo que no pude más que decirle: "Bueno, gracias!".
Dimos media vuelta, después de ser besuqueados nuevamente por la vieja desconocida (a mi supuesto "novio" lo besuqueó más y lo abrazó. Mirala a la vieja! Le gustó el pendejo jaja).
Después del entierro fuimos todos los primos y algunos tíos a la casa de mi tía y nos quedamos un rato con ellos. Mientras tomábamos algo le contamos todo eso a los demás. Mi tía se mataba de la risa y dijo: "Eso lo mandó tu tío... nunca le gustó ver llorar a la gente y siempre decía que en su velatorio no quería que nadie llorara".