Por el equipo...

Y como no todo es color de rosa en la vida, ayer se nos lesionó la arquera. Caída de la bici (siendo perseguida por un perro callejero que le tiene ganas) y fractura de ligamentos cruzados... qué tul?? Parece que está de mona esta lesión... yo prefiero estar out.
Entonces mañana la operan y va a estar varios meses sin jugar, al menos 6...

Y pensar que el hijo de puta de Matías Alé decía el año pasado que bailaba con el mismo diagnóstico.
Que nos presente a su mágico traumatólogo, porque nuestra arquera no puede ni apoyar el pie.

Whatever... la frígida de la arquera suplente se llevaba mal con el grupo y se fue a la mierda hace un mes (estaba en estrella). Por lo tanto nos quedamos sin arquera por el resto de torneo, del cual faltan solo 4 fechas.

Alguna arquera de hockey por ahí? No? Bueno, gracias igual.

Entonces como quien escribe tuvo su pasado de niña gordita que iba al arco, y las demás no, porque ellas sí eran flaquitas y corrían como el viento, fui llamada y casi llevada a la rastra hacia el arco.
Ahora, después de muchos años sin atajar, debo volver al arco por el resto del torneo.
Y te digo que con muchos kilos de menos, no es lo mismo.

Así que bueno, hoy tempranito entrené como arquera, y te informo que esa pechera y demás protectores sí que pesan después de 2 horas de entrenamiento bajo el sol.

Todo sea por el bien del equipo...

Pero como soy positiva, y más en esta época, le veo el lado amable:

- Me tratan como muñequita de cristal (cuando no me cagan a bochazos) porque si yo no atajo tienen que poner a otra chica del equipo y ellas no atajaron nunca, porque durante el torneo no puede jugar nadie que no haya sido inscripto antes del comienzo del mismo.
- La ex gordita triunfó y ahora ya no tiene sobrepeso, pero conserva tremenda pechuga, ja!
Que no se ve por la pechera, pero bueno... las chicas están ahí :P
- El técnico para tratar de convencerme me dijo "Vos sos la capitana... vos tenes alma de lider...". Bue, bue... no te creo, pero suena lindo.
Me gusta jugar, no me gusta perder, tengo orgullo y quiero este torneo. Por eso voy a atajar. Punto.
- Cargarse al equipo al hombro se siente genial, al menos para mí, que siempre me gustaron los desafíos.
- El entrenamiento de arquera se hace más duro porque una carga con todo el equipo protector, y yo no tengo tiempo de acostumbrarme de a poco porque juego el sábado, así que por estas horas, y seguramente por estos días caminaré como el 5 de Dálmine, producto del dolor de piernas, pero bueno... terribles gambas estoy sacando y como si fuera poco el traste allá arriba como en su mejor época, ja!
- Nadie puede reprocharme nada. Si atajo bien me felicitarán y si atajo mal los demás cerrarán sus cantos y aquí no a pasado nada, porque nadie quiso atajar, y porque yo te atajo de onda, pero Gioco es defensora... y está felíz, felíz, como Riquelme jejeje.